El proyecto sociocultural “Suzuki en Santiago de Cuba” nació el 25 de octubre de 2019 con un sueño: implementar en la ciudad el reconocido método de enseñanza musical Suzuki. Desarrollado por el pedagogo y violinista japonés Shinichi Suzuki, este enfoque compara el aprendizaje musical con la adquisición de la lengua materna, promoviendo la idea de que el talento no es innato, sino que puede cultivarse con la educación adecuada.
Más que enseñar a tocar un instrumento, este método busca formar niños y niñas a través de la música, brindándoles un espacio donde puedan desarrollar valores como la disciplina, la perseverancia y el trabajo en equipo. Un aspecto clave del proyecto es la participación activa de las familias, quienes, junto a los profesores, crean un entorno de aprendizaje enriquecedor y afectivo.
Actualmente, el proyecto se desarrolla a través de talleres vocacionales en el Conservatorio de Música Esteban Salas, beneficiando directamente a 5 profesores de violín y a 50 niños y niñas de entre 3 y 6 años en el municipio de Santiago de Cuba, conjuntamente con sus familias.
Implementar el método de enseñanza musical Suzuki en el Conservatorio Esteban Salas a través de talleres vocacionales que no solo despierten el amor por la música, sino que también sirvan como una poderosa herramienta para educar en valores, promoviendo la participación activa de las familias.
Diseñar talleres que introduzcan a los niños y niñas en el mundo de la música desde una edad temprana, estimulando sus capacidades y preparándolos para un estudio más profundo del arte musical.
Fomentar un aprendizaje colaborativo, donde profesores, alumnos y familias trabajen en equipo, fortaleciendo los lazos afectivos y motivando a los padres a ser parte activa del proceso de formación de sus hijos, tanto en clase como en la práctica diaria.
El proyecto al ser un taller vocacional uno de sus objetivos también es que sirva como cantera para futuros músicos, pero además el gran propósito de educar a través de la enseñanza musical en valores; inculcando el amor hacia la profesión, enseñando el respeto a maestros y padres, el espíritu de sacrificio, a compartir y no a competir, el trabajo en equipo junto a sus padres y demás alumnos. Propiciar el diálogo con la familia ya que los padres se convertierten en los profesores en la casa y asumen gran responsabilidad en la enseñanza. A través de esta labor se pretende, enriquecer el gusto artístico y dar las herramientas necesarias para la elección de una futura profesión en el ámbito musical.
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